Las podas en redes eléctricas son importantes para garantizar la seguridad y el buen funcionamiento de la distribución de energía:
Evitar riesgos eléctricos
Las podas reducen el riesgo de caídas de ramas o cortocircuitos que pueden dañar árboles o poner en peligro a las personas.
Prevenir interrupciones de energía
Las ramas que crecen cerca de las líneas eléctricas pueden causar apagones.
Evitar incendios
Las podas ayudan a prevenir incendios en viviendas cercanas a las redes eléctricas